La musealización del patrimonio cultural inmaterial

  1. Pontes Giménez, María Victoria
Zuzendaria:
  1. María Luisa Bellido Gant Zuzendaria

Defentsa unibertsitatea: Universidad de Granada

Fecha de defensa: 2017(e)ko uztaila-(a)k 06

Epaimahaia:
  1. Ignacio Luis Henares Cuéllar Presidentea
  2. Miguel Ángel Sorroche Cuerva Idazkaria
  3. Nuria Rodríguez Ortega Kidea
  4. Juan Manuel Monterroso Montero Kidea
  5. María Teresa Marín Torres Kidea
Saila:
  1. HISTORIA DEL ARTE

Mota: Tesia

Laburpena

La investigación sobre la musealización del patrimonio inmaterial se puede considerar un objeto de estudio incipiente que admite el tratamiento desde numerosos puntos de vista. Más allá de la definición ofrecida por la UNESCO, la institucionalización del patrimonio inmaterial ha contribuido a la redefinición del concepto de patrimonio. En esta investigación se abordan las implicaciones de la Convención de 2003 para los museos y se analizan los principales aspectos conceptuales y museográficos que se derivan de la incorporación del patrimonio inmaterial en el panorama museístico español. La elección de este tema como objeto de una tesis doctoral se fundamenta en la necesidad de dar respuesta a una realidad observada que reclama una mayor reflexión teórica. En la mayoría de publicaciones dedicadas a este tema se observa una reiteración de los casos de estudio y experiencias referentes, por lo que es indispensable sistematizar la información disponible e identificar las áreas de especial interés en la musealización del patrimonio inmaterial. Para ello, se combina la investigación exploratoria de las iniciativas que se están llevando a cabo con el desarrollo de un marco de referencia en el que integrar los objetivos de partida. Al analizar las principales disposiciones ofrecidas por organismos oficiales, uno de los aspectos considerados clave es la participación de las comunidades, grupos sociales o sujetos, en los procesos de musealización de su patrimonio, precisamente uno de los límites que afectan a muchas instituciones españolas. El protagonismo de los titulares, portadores o depositarios en la identificación y selección de los bienes que integran su patrimonio inmaterial, introduce nuevos factores a tener en cuenta en la designación del patrimonio y altera la autoridad ejercida exclusivamente por la institución museística. Se identifican los modelos y prácticas sobre los que parece existir cierto consenso para ser considerados referentes, la ecomuseología y los nuevos museos de sociedad, modelos que no han adquirido un especial desarrollo en España. En una segunda fase, el análisis se centra en las principales implicaciones de la Convención de 2003 para los museos. La introducción de la “cultura viva” en su funcionamiento habitual conlleva la modificación del objeto de museo, el predominio de la contemporaneidad como dimensión temporal, el compromiso con la diversidad cultural y la creación de nuevas relaciones entre el museo y las comunidades representadas. El concepto de patrimonio inmaterial traslada el foco de atención de los objetos a las personas, los procesos y las prácticas e introduce una nueva lógica para la representación de las culturas en el museo. En este nuevo marco, los testimonios orales y las historias de vida pueden adquirir un nuevo estatus como elemento patrimonial, lo que lleva a valorar los aspectos implicados en la musealización de la memoria, centrando la atención en el auge experimentado por las “museografías de las historias de vida”. También adquieren un especial desarrollo las exposiciones dedicadas a la inmigración, los procesos de reinvención de los museos etnológicos, la representación de la vida cotidiana o la formación de colecciones representativas de la contemporaneidad, por la forma en que permiten reflexionar sobre las implicaciones del nuevo concepto para la práctica museística. A lo largo de la investigación se defiende la necesidad de superar la idea que limita la musealización del patrimonio inmaterial a la documentación y conservación de las manifestaciones amenazadas o en vías de desaparición. Es inevitable que el museo que tiene entre sus objetivos mostrar los problemas que afectan a la sociedad contemporánea, recuperar la memoria local o representar la diversidad cultural, incluya el patrimonio inmaterial en sus discursos. Este es uno de los motivos por los que este patrimonio está cada vez más presente en los nuevos museos de sociedad o en los museos dedicados a la cultura cotidiana contemporánea y uno de los desafíos a los que la mayoría de instituciones españolas deberán hacer frente. Se han identificado algunas de las ausencias que impiden a los museos etnográficos españoles ofrecer una representación adecuada de la realidad cultural, fundamentalmente el pasado colonial, la inmigración, la perspectiva de género, la contemporaneidad o los aspectos más controvertidos del pasado reciente. Aunque la introducción del patrimonio inmaterial conlleva su materialización, es un riesgo que el museo tiene que asumir si quiere desempeñar su función social en el contexto actual, globalizado y multicultural. Para ello, deberá explorar nuevos métodos de trabajo y soluciones museográficas que minimicen el impacto sobre el que, por naturaleza, es un patrimonio vivo. En el panorama español, la interpretación del patrimonio inmaterial que ha predominado hasta el momento está en consonancia con un concepto de tradición que ya no se considera válido.