Los impuestos indirectos en las operaciones de comercio electrónico

Résumé

Al surgir el comercio electrónico como una forma de contratación moderna y eficiente, distintos países preocupados por este acontecer han intentado idear la forma de poder regular este fenómeno virtual, todo ello buscando la manera de establecer parámetros que permitan su desarrollo, eviten su estancamiento y, a la vez, se minimicen todas las formas de conflictos tanto entre particulares como entre la Administración tributaria y los contribuyentes, que puedan llegar a generar la evasión y el fraude fiscal internacional. La aplicación de impuestos a las operaciones realizadas en el ciberespacio no es una tarea fácil, debido a las ambigüedades existentes relacionadas con el origen de las operaciones, y la ubicación de éstas en las jurisdicciones tributarias adecuadas, que requeriría de una armonía internacional. Al abordar este tema nos encontramos con la existencia de un consenso generalizado de que los problemas tributarios de este tipo de comercio son diversos. A raíz de la utilización del comercio electrónico on line, se puede comerciar instantáneamente con productos intangibles sin dejar ningún rastro físico de su presencia, resultando de esta forma imposible realizar un control en las fronteras y aduanas de las transmisiones que no comportan entregas físicas de bienes. Las dificultades para determinar la localización y la identidad de un sujeto hacen difícil o imposible la aplicación del impuesto, aunado al desarrollo exponencial de los medios de pago anónimos. Las empresas pueden actuar en un paraíso fiscal y, por lo tanto no pagan impuestos o son mínimos. La relevancia que en concreto suscita el estudio de la fiscalidad indirecta del comercio electrónico, está basada en la necesidad de preservar los ingresos obtenidos por las Administraciones tributarias relacionados con el consumo.