Evaluación de los hábitos alimentarios e ingesta nutricional en la población adulta de las Islas Baleares

  1. Salas García, Rogelio
Dirigida por:
  1. Josep Antoni Tur Marí Director/a

Universidad de defensa: Universitat de les Illes Balears

Fecha de defensa: 09 de marzo de 2012

Tribunal:
  1. Lluís Serra Majem Presidente/a
  2. Antoni Sureda Gomila Secretario/a
  3. Jordi Pich Solé Vocal
  4. Javier Aranceta Bartrina Vocal
  5. María Fátima Olea Serrano Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

Las encuestas nutricionales son una herramienta de gran utilidad para monitorear el estado nutricional de una población o grupos seleccionados; este proceso permite evaluar el consumo de alimentos, identificar grupos en riesgo, predecir tendencias y evaluar intervenciones, aportando información fiable a los responsables de establecer políticas alimentarias y definir prioridades en la intervención nutricional. Los estudios epidemiológicos que han sido desarrollados con antelación, nos han dejado claro la relación entre hábitos alimentarios y salud, así como el importante rol que juegan los nutrientes en ciertas enfermedades, principalmente en los países desarrollados donde la incidencia de obesidad y enfermedades asociadas es cada vez mayor. En España, además de la información respecto a disponibilidad alimentaria que aporta el Instituto Nacional de Estadística (INE) y el Ministerio de Agricultura Pesca y Alimentación (MAPA); se han desarrollado también otras encuestas nutricionales en diferentes comunidades autónomas donde la evaluación nutricional además de tener en cuenta la ingesta de alimentos, también han incluido evaluación antropométrica y marcadores bioquímicos. Tal es el caso de Las Illes Balears, que en los años 1999 - 2000 desarrolló la primera encuesta de nutrición (ENIB). En este estudio se pudo demostrar que la prevalencia de obesidad fue inferior a la media estatal y que el modelo alimentario de la población era típicamente mediterráneo aunque con algunas particularidades, principalmente el riesgo de ingestas inadecuadas. En este modelo de alimentación destacaba el consumo elevado de frutas, verduras y frutos secos, el uso casi exclusivo de aceite de oliva y el elevado consumo de leche de vaca, un consumo moderado de carnes rojas y alto de pollo y cerdo, pero menor la ingesta de legumbres, patatas, cereales y huevo que en otras regiones de España. VI Diez años después y contando ya con el desarrollo de políticas alimentarias como los objetivos nutricionales y las guías alimentarias definidas por La Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC), la segunda encuesta de nutrición (OBEX 2009-2010), reveló los cambios en los hábitos alimentarios de las Illes Balears, los cuales difieren de la tradicional dieta mediterránea y que tienen similitud con los observados en el mundo y otras regiones de España. Así, la baja ingesta de frutas, verduras, huevo y leguminosas son evidentes. Además, la población más joven mostró una clara predilección por un mayor consumo de carne, leche y derivados, aceites y grasas, patatas, cereales, azúcar, bollería y bebidas azucaradas. Estos cambios indican hábitos alimentarios inadecuados en la población adulta de Baleares, reflejados en una baja calidad de la dieta de acuerdo al Índice de Calidad de la Dieta – Internacional (DQI-I) y al Índice de Alimentación Saludable (HEI). Una coordinación intersectorial para la evaluación de políticas y estrategias en alimentación, principalmente en educación en salud y nutrición de la población, son indispensables para salvaguardar la permanencia de la tradicional dieta mediterránea en las Illes Balears.