La influencia del mundo árabe islámico en la geopolítica de la postguerra fríaOriente Medio (1989-2011)

  1. el Khannoussi, Jad
Dirigida por:
  1. Julio Pérez Serrano Director/a

Universidad de defensa: Universidad de Cádiz

Fecha de defensa: 22 de septiembre de 2017

Tribunal:
  1. Mohammed Kharchich Presidente/a
  2. Antonio Javier Martín Castellanos Secretario/a
  3. Francisco Jiménez Bautista Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 506813 DIALNET

Resumen

Inscrita en el extenso mundo islámico se localiza la región árabe, una pieza maestra en el tablero geopolítico mundial. Sus fronteras se extienden desde el Atlántico hasta Irán, y constituye el corazón del mundo. Una zona que difiere en gran medida de otras, no sólo por sus enormes riquezas naturales (67% de las reservas mundiales) o por ser el centro espiritual de las tres religiones monoteístas, sino también por su privilegiada ubicación geográfica, nexo de unión entre tres continentes, una ventaja que le permite controlar los canales marítimos más importantes del mundo. Desde el alba de los tiempos desempeñó un protagonismo central en la determinación de los pueblos, y en el proceso de ascenso y caída de las grandes potencias; en otras palabras, la región árabe trazó los parámetros del moderno sistema mundial. Cualquier potencia que quisiera controlar las reglas del orden global, lo primero que debía hacer era apoderarse de este tesoro geoestratégico. El ejemplo más claro lo hallamos en la política de Estados Unidos durante las últimas décadas. Por tanto, todos los sucesos que se están produciendo allí tendrán consecuencias sobre el resto de la humanidad, especialmente ante el aumento de los conflictos, tanto internos como externos, que reflejan el caos en que esta sumergido el sistema global de la posguerra fría. La presente tesis se basa en la hipótesis de que la realidad política, social, económica y cultural, así como las constantes intervenciones externas, pueden desempeñar un papel crucial en el devenir de la civilización humana durante las próximas décadas. Para analizar las hipótesis planteadas y desarrollarlas se ha emprendido este estudio geopolítico. Y aunque tal procedimiento no posee un método específico concreto, se han recurrido a equivalentes que resultan muy útiles. Por este motivo se ha estimado oportuno acogerse a los diferentes métodos que apunta Hortshore, entre los que destacan cuatro: de poder, histórico, funcional y morfológico. Al final se llegó a la conclusión de que la realidad actual, además de provocar una lucha inacabable en la región, se va a intensificar de manera negativa durante las próximas décadas, si no se efectúa un giro radical a los acontecimientos. Precisamente, uno de los objetivos por el que se ha emprendido este estudio. Se han propuesto soluciones a los diferentes campos, y por medio de ellas se espera mostrar posibles vías de actuación a los dirigentes, o al menos despertar el interés del mundo académico, tanto árabe como occidental, para frenar la inestabilidad creciente en la búsqueda común de un mundo más humano.