El artista posicionado. Arte político, social y comprometido en contextos de conflicto

  1. Tortosa Ibañez, Laura
Dirigida por:
  1. Fernanda García Gil Directora

Universidad de defensa: Universidad de Granada

Fecha de defensa: 04 de marzo de 2019

Tribunal:
  1. Maribel Doménech Ibáñez Presidente/a
  2. Jose M. Fernández Freijanes Secretario
  3. Isabel Tejeda Martín Vocal
  4. Domingo Campillo García Vocal
  5. João Wesley de Souza Vocal
Departamento:
  1. PINTURA

Tipo: Tesis

Resumen

El compromiso hacia una causa o razón de ser se sitúa en torno a diferentes fundamentos, ya sean ideológicos, políticos o culturales. El sujeto comprometido fundamenta sus acciones bajo el abrazo de una moral ética, un deseo que conduce su trabajo hacia diversas causas, dependiendo de los diferentes fundamentos. El arte ha sido y continúa siendo objeto de investigación hacia su utilidad ante éstos diferentes fundamentos. En este caso, nos referimos al arte que se caracteriza por la creación de un lenguaje artístico basados en las sensaciones y las emociones de un tiempo vivido. Un momento social, un contexto donde el artista se posiciona y del cual parte su proceso creativo. Los temas de sus obras reflejan la actualidad político-social del momento y utiliza unas estrategias propias de su lenguaje, como la reflexión, la decodificación, el análisis, la acción, la micropolítica, lo relacional, lo contextual y discursivo, para la producción de imágenes críticas del mundo. Sobre todo, el esfuerzo de recepción y reflexión recaerá sobre el espectador, que se convierte en una pieza principal, como actor en el eje: obra/artista/espectador. Las experiencias artísticas que engloban este arte, utilizan una serie de herramientas en sus procesos, éstas pueden ser: - De recopilación y difusión, como el documento, el archivo, el cartel, la revista. - De transformación, como el vídeo, el fotomontaje. - Espaciales, que cuestionan el espacio, como la ocupación y liberación de espacios. - Poéticas, como la metáfora y la alegoría. - Performativas, como el cuerpo y el propio lenguaje. - Lingüísticas como la propia palabra. - Relacionales, como la colaboración y la participación ciudadana. - De adjudicación, como la apropiación y recreación de los signos de la cultura. - De representación como el teatro político. - Lúdicas, como la fiesta. - Urbanísticas, como la cartografía y en las últimas décadas internet y las nuevas tecnologías. Esta serie de herramientas ayudaran en el proceso creativo hacia la salida simbólica del posicionamiento del artista. Este nuevo paradigma implica una ruptura con los lenguajes tradicionales, una nueva percepción del mundo que crea un pensamiento. La acción social y política como arte, se materializa a través de estrategias artísticas propias que ayudan a guiar al espectador en la tarea de desentrañar que quieren decir estas imágenes y al mismo tiempo, el artista comparte su posicionamiento con el espectador. En este caso, se unen pensamiento, entorno y compromiso a artista, obra y espectador. Por otra parte el pensamiento político y social de la cultura influencia al artista en su trabajo. Sobre todo a partir de la década de los 70 dónde se puede apreciar un cambio en las reflexiones de los artistas, donde la política se convierte en sujeto de primer orden. En la actualidad el arte político comprometido, “militante” de las vanguardias deja de tener sentido, dando lugar a nuevos modelos adecuados a la época en que vivimos. Estos nuevos modelos se mueven entre los bordes que separan al arte de la política, situándose en los límites. De esta forma, las acciones y creaciones llevadas a cabo por el artista conllevan un compromiso consigo mismo y con su entorno, se convierte en un arte político, social y del pensamiento. Después de la década de los 70, el arte y el propio pensamiento del artista dejan de ser un instrumento político. La tendencia actual del arte político es convertirse en una opción para el espectador entre un variado campo de experiencias artísticas con los que producir imágenes. Según la opinión de Jacques Rancière “la política consiste en hacer visible lo que no es visible". Si analizamos esta opinión sobre la labor del artista político comprometido actual, podemos observar que una de las principales finalidades es resurgir los pequeños detalles que no son perceptibles por algunos, pero sí lo son para el artista. En suma, tal visibilidad se revele. Para delimitar el objeto de estudio en su complejidad, justificamos la hipótesis de trabajo, centrándonos en un compromiso moral hacia una problemática localizada en un contexto concreto: contextos en conflicto socio-político. Dentro de este contexto damos por sentado que existen los espacios de poder que originan los conflictos de índole socio-político, que afectan por ello al espacio de lo común. En lo referente al arte y a sus productores, creemos que no conviven ajenos a estos espacios/conflictos y vamos a analizar ciertas manifestaciones visuales que centran sus propósitos en lidiar, transformar, visualizar y denunciar las problemáticas que coexisten en estos contextos. Creemos que el origen de la funcionalidad política de ciertas manifestaciones visuales se origina en el compromiso ético de los propios productores visuales. Por esta razón, el propósito principal de esta investigación gira en torno a la identificación de las características que mantienen los procesos creativos atravesados por la lógica comprometido del artista. Muestran la pretensión política, el conflicto y las problemáticas de la sociedad a través del lenguaje del artista. Nos interesa destacar la evolución del compromiso ético del artista hacia unas problemáticas y sus implicaciones en la escena actual. El trabajo historiográfico nos ayuda a crear un hilo conductor para asentar las bases del posicionamiento artístico. También, para la continuación en la actualidad del binomio arte/compromiso, nos ayudan las sucesivas lecturas y críticas de las diferentes producciones visuales. Esta síntesis nos sirve para comprender cómo trabajan en el presente la diversidad de actores en el panorama cultural que continúan defendiendo la importancia de los nexos de unión entre el compromiso ético en el espacio de lo común y las producciones visuales. En resumen, desarrollamos un estudio y análisis de los fundamentos del compromiso en el arte político y su desarrollo a partir de la década de los setenta hasta nuestros días. Mostramos una serie de manifestaciones visuales que reflejan las diferentes vías de actuación del arte político posicionado. Para ello hemos necesitado un exhaustivo estudio de documentación en diferentes campos: sociológicos, políticos, antropológicos, filosóficos y estéticos. Así mismo, del visionado de catálogos de artista y exposiciones para poder dar respuesta a la hipótesis que planteamos. La hipótesis, además engloba dentro del campo del compromiso artístico las estrategias desde una lectura micropolítica, que plantea una actuación del artista menos militante contra la sociedad dominante. El artista hará un intento por reparar la salud de la sociedad desde posturas silenciosas. Por consiguiente, la hipótesis demostrará que a partir de procesos creativos atravesados por la lógica del compromiso artístico, se pueden difundir las pretensiones políticas, los conflictos y las problemáticas de la sociedad a través de su lenguaje. La pretensión de este estudio es, que partiendo de un compromiso ético se desarrollen una serie de estrategias visuales y poéticas, que tengan por funcionalidad: transformar, visualizar, difundir o lidiar con las problemáticas dentro del conflicto socio-político. Nuestro interés dentro de esta investigación se centra en identificar una serie de caminos que conllevan diferentes estrategias visuales y poéticas desde la lógica del compromiso. Esto nos permite crear un mapa de relaciones entre el objetivo, contexto, conflicto e interpretación de las manifestaciones visuales que analizamos y su efectividad en el espacio común.