Percepción del profesorado en formación sobre la violencia entre igualesconocimientos y actitudes

  1. Gutiérrez Angel, Nieves
Dirigida por:
  1. María del Carmen Pérez Fuentes Director/a
  2. María del Mar Molero Jurado Codirector/a

Universidad de defensa: Universidad de Almería

Fecha de defensa: 30 de marzo de 2017

Tribunal:
  1. José Carlos Núñez Pérez Presidente/a
  2. José Jesús Gázquez Linares Secretario/a
  3. María Paz Bermúdez Sánchez Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 464913 DIALNET

Resumen

En la actualidad, la violencia escolar se ha consolidado como una de las temáticas con mayor preocupación social, debido a su aumento y presencia en el ámbito educativo. Junto con esta elevada prevalencia, también han proliferado diferentes estudios acerca de la misma, destacando distintos estudios llevados a cabo a nivel nacional. Al igual que el propio fenómeno, los estudios relacionados con el mismo, han ido evolucionando a lo largo de los años, en cuanto a las temáticas abordadas y protagonistas, como es el caso de la toma en consideración de la visión del profesorado, considerado en la actualidad como un tema de gran interés. El presente estudio analiza las actitudes del profesorado en formación ante la violencia escolar, así como la posible influencia en el mismo de los componentes de la inteligencia emocional, y los tipos de violencia identificados por los mismos. La muestra está compuesta por un total de 565 alumnos de los últimos cursos de las enseñanzas de Grado en educación infantil y Grado de educación primaria de la Universidad de Almería, de los cuales el 22,6% (N=128) eran hombres, y el 77,4% (N=438) eran mujeres. Los datos fueron recogidos a través de un cuestionario elaborado “ad hoc” en el que en una primera parte se solicitan datos demográficos: Edad, sexo, titulación, tipo de centro en el que han realizado sus prácticas y duración de dicha formación en el contexto escolar, y una segunda parte, compuesta por tres cuestionarios: El primero de ellos, el “cuestionario sobre maltrato entre iguales en la escuela” elaborado por Nicolaides, Toda, y Smith (2002), el cual evalúa los conocimientos, capacidades, actitudes y percepciones del profesorado sobre la violencia escolar. El segundo de ellos, el “Trait Meta-Mood Scale-24 (TMMS-24)” elaborado por Fernández-Berrocal, Extremera, y Ramos (2004), evalúa las tres dimensiones de la Inteligencia Emocional aportadas por el modelo de Salovey y Mayer, es decir, la percepción, la claridad, y la regulación emocional. Y, por último, el “Cuestionario de Violencia Escolar-Revisado, CUVE-R” elaborado por Álvarez-García et al. (2011), que evalúa distintos tipos de violencia escolar, en concreto, la violencia física, la violencia verbal, la violencia a través de las tecnologías de la información y la comunicación, la disrupción en el aula y la exclusión social (ejercidas tanto entre el propio alumnado, como entre el alumnado y el profesorado). El análisis de datos se ha realizado a través del programa estadístico SPSS.22. Dentro de este trabajo, se identifican como variables independientes tanto la edad, el sexo, la titulación de procedencia, la experiencia educativa, tipo o lugar del centro. Y como variables dependientes, las creencias previas sobre esta temática, los conocimientos sobre dicho tema, la identificación y caracterización tanto de los agresores como de las víctimas, las distintas intervenciones llevadas a cabo, las estrategias tanto realizadas como recomendadas, y la valoración de la propia formación. Los niveles de percepción, claridad y regulación emocional, y los distintos tipos de violencia escolar. Por lo que, atendiendo a las mismas, se ha realizado el análisis estadístico de los datos la prueba t de Student, el análisis univariante y multivariante para identificar la posible relación o no entre las distintas variables. Los resultados ponen de manifiesto el incompleto conocimiento del concepto de violencia escolar, por parte del profesorado en formación, pese a la gran importancia otorgada a este tema. Así como el hecho de sentirse con menor capacidad para intervenir con los agresores que con el resto del alumnado. En cuanto a las estrategias, tanto empleadas como recomendadas, ambas están relacionadas con el diálogo y comunicación. Y consideran a la formación en cuanto a esta temática esencial en su profesión. En relación a la identificación de cada uno de los roles, identifican a las víctimas como alumnos débiles y con baja autoestima, mientras que los agresores son considerados alumnos populares y con facilidad para irritarse. De tal manera, mientras que las víctimas son percibidas como alumnos procedentes de ambientes familiares similares al resto, los agresores son percibidos como alumnos procedentes de ambientes familiares donde no existen las relaciones positivas entre sus miembros y se da la presencia de elevado castigo físico. El tipo de violencia más percibido por el profesorado en formación, es la violencia del profesorado al alumnado, seguido de la violencia a través de las tecnologías de la información y la comunicación, y la violencia verbal entre el alumnado. El profesorado en formación cuya experiencia educativa ha sido en centros públicos, son quienes detectan un mayor número episodios relacionados con la violencia física indirecta por parte del alumnado y la violencia del profesorado hacia el alumnado. En cuanto a la Inteligencia Emocional, los niveles de atención emocional son más altos en mujeres, en el profesorado perteneciente al Grado en educación infantil, y en el profesorado en formación que durante su etapa educativa fue víctima. En cuanto al profesorado en formación que durante su etapa educativa fue agresor u observador, no existen diferencias en ninguna de las dimensiones de la Inteligencia Emocional. Teniendo en cuenta las limitaciones existentes de este trabajo referidas a la muestra o el carácter transversal del mismo, futuras investigaciones tendrán por finalidad descubrir si tanto el factor de la experiencia como el factor de la formación, producen cambios en los resultados.