El sujeto extranjero en el discurso de la directiva de retorno¿Más allá de la dicotomía del yo y del otro?

  1. Lehnen Cojocaru, Lacette Maria
Dirigida por:
  1. Francisco Jiménez Bautista Director

Universidad de defensa: Universidad de Granada

Fecha de defensa: 26 de marzo de 2021

Tribunal:
  1. Rosa Ana Clemente Estevan Presidente/a
  2. José Antonio Esquivel Guerrero Secretario
  3. Mercedes Alcañiz Moscardó Vocal
  4. Nuria Romo Avilés Vocal
  5. Clemente Penalva Verdú Vocal
Departamento:
  1. ANTROPOLOGÍA SOCIAL

Tipo: Tesis

Resumen

El marco epistemológico que se ha propuesto en esta investigación de Tesis Doctoral se circunscribe dentro del dominio del Análisis del Discurso como herramienta de interpretación de los Corpus seleccionados. El texto de la Directiva de Retorno 2008/115/CE, que legaliza la deportación de inmigrantes ‘irregulares’ en territorio europeo, constituye el telón de fondo de los tres Corpus del análisis. Los supuestos teóricos de la fenomenología, de la sociolingüística y de la psicología sustentan la problematización de la ley a través del análisis de los argumentos discursivos de los europarlamentarios de la Unión Europea a favor y en contra de la aprobación de la Directiva de Retorno, que reconstruyen la historicidad del sujeto extranjero, reincorporando los procesos simbólicos del imaginario social (económico, político y cultural) e ideológico de un sistema político segregacionista que no considera a los inmigrantes como sujetos de su propia historia, revelando un racismo instituido, mediante el discurso benevolente de plantear una “deportación segura”. El análisis de las imágenes divulgadas en la red interactiva oficial del Parlamento, asociadas al texto publicitario de la aprobación de la ley, se muestra decisivo para reflejar la discriminación institucional, cuando registran únicamente imágenes de personas “racializadas”, lo que invita a contextualizar distintos ángulos de análisis del fenómeno jurídicosocial. Desde América Latina, el emisor del discurso - Evo Ayma Morales- se basa en la memoria histórica de invasión y colonización de los pueblos nativos, apropiándose de la historia, reafirmando a los europeos como responsables de la explotación de las tierras de América y, como sello de la memoria colectiva, atribuyéndoles una marca fundacional protagonizada por el Viejo Mundo, que se reviste en una deuda impagable. La Directiva de Retorno, que propone, igualmente, armonizar las políticas migratorias en los Estados miembros de la Unión Europea, se muestra como un nuevo-viejo ciclo de los discursos dominantes, que reproducen la exclusión, enmascarados a través de una dualidad social, las dicotomías históricas y los mismos estigmas que señalan que la deportación marca la diferencia que sirve para definir “quién es de dentro” y “quién es de fuera”. Es el poder de la ley la que los hace sucumbir frente a la deportación que ha legitimado el discurso políticamente (in)correcto de la élite política. El inmigrante deportado es quien muere todos los días como un ser (no) autónomo que fue en búsqueda de la tierra, que ha construido en su imaginario, como el lugar de las oportunidades. Es el que verdaderamente representa a todos los extranjeros, en su condición utópica de ser sujetos de sí mismos dentro la sociedad de la exclusión. ¡Sin autonomía de decisión para su vida son sujetos simbólicamente muertos!