El coordinador en materia de seguridad y salud durante la elaboración del proyecto de obrapieza angular de la prevención de riesgos en las obras de construcción

  1. BUENDIA GALVEZ, SERGIO
Dirigida por:
  1. Inmaculada Sánchez Ruiz de Valdivia Directora

Universidad de defensa: Universidad de Granada

Fecha de defensa: 20 de septiembre de 2013

Tribunal:
  1. Antonio Ortí Vallejo Presidente
  2. Pedro Espinosa Hidalgo Secretario
  3. Pilar Cristina Izquierdo Gracia Vocal
  4. Francisco Lledó Yagüe Vocal
  5. Manuel Miguel Gómez del Castillo Gómez Vocal
Departamento:
  1. DERECHO CIVIL

Tipo: Tesis

Resumen

Hace ya más de veinte años, el Informe Lorent puso de manifiesto la necesidad de actuar preventivamente en la fase de proyecto y de planificación. Este trabajo, que debe su nombre al ingeniero belga Pierre Lorent, conocido como uno de los padres de la Directiva 92/57/CEE, sirvió de modelo en la redacción de la misma. En dicho informe se realizó un análisis de los accidentes mortales en las obras de construcción, concluyendo que el 35% de ellos tienen su origen en la fase de concepción, es decir, en la fase de diseño; otro 28%, tienen su origen en una inadecuada organización del trabajo, es decir, en la fase de planificación y organización. El restante 37% de accidentes mortales tienen su origen en la ejecución obra. Todos los esfuerzos en reducir la siniestralidad durante los últimos quince años, los hemos enfocado en actuar sobre el 37% de incidencia que supone la fase de obra. Fase en la que cada vez cuesta más intervenir y donde encontramos caminos sin salida en el propósito de reducir la siniestralidad. En esta fase sólo tenemos la posibilidad de imponer medidas que no dejan de ser meras actuaciones correctivas, para dar respuesta a aquellas situaciones y actividades que no han sido previstas en la fase de proyecto y, por tanto, no han podido ser evaluadas. En estas circunstancias, se pierde el control económico de la obra, tan importante para el promotor, al tener que agregar actividades que no han sido previstas ni valoradas en el proyecto, pudiendo afectar a los plazos de ejecución previstos, retrasando la obra. Pierre Lorent, en una entrevista concedida al Colegio de Aparejadores de Sevilla y realizada por el profesor Martínez Cuevas, señaló que la prevención no se añade, se anticipa. De ahí la importancia de incidir en la fase de proyecto y planificación. Es hora ya de invertir tiempo y recursos para aplicarlos a este otro 63%, todavía poco explorado. Este trabajo se dirige clara y directamente a la fase de elaboración del proyecto, porque es ahí donde creemos que se encuentra el verdadero origen de los accidentes en el sector de la construcción. El coordinador en materia de seguridad y salud es la figura que la Directiva 92/57/CEE ha creado para organizar las labores de todos los agentes que intervienen en el sector de la construcción en materia preventiva. Esta figura se desdobla en dos agentes, en función de la etapa (o fase) en la que se requiera su presencia: CLICuno para la fase de elaboración del proyecto de obra y otro para la fase de ejecución de obra. Esta doble vertiente que puede adoptar el coordinador no ha sido desarrollada de manera proporcionada en el Real Decreto 1627/1997. Si bien, en el capítulo II del Real Decreto, relativo a las disposiciones específicas de seguridad y salud durante las fases de proyecto y ejecución de las obras, se creó la expectación de descubrir estas dos versiones del coordinador, lo cierto es que el legislador no ha sabido concretar las funciones del coordinador en fase de proyecto, de tal manera, que queden perfectamente recogidas en un artículo específico. Sí lo hizo, sin embargo, para el coordinador en fase de ejecución de la obra, concretamente en el artículo 9 del Real Decreto. Esta es una de las circunstancias que han favorecido la ineficiente implantación del coordinador en fase de proyecto en España. La puesta en valor del coordinador en materia de seguridad y salud durante la elaboración del proyecto de obra es esencial, debiendo reivindicar el lugar que en materia de seguridad y salud le corresponde y que la legislación le atribuye. Y esto podemos conseguirlo reforzando su identidad, precisando qué funciones tiene y dotándole de las herramientas necesarias que nuestra normativa no ha sabido concretar y que, de manera dispersa, va esbozando por distintos reglamentos sin que exista una línea clara de actuación. Para poner en valor al coordinador en materia de seguridad y salud durante la elaboración del proyecto de obra, nos apoyamos en el análisis que hemos realizado de los veintisiete países de la UE, mediante un estudio de Derecho Comparado enfocado, en exclusiva, a esta figura y cómo la han interpretado en el resto de Europa. A partir de dicho estudio, hemos profundizado, conociendo bajo qué circunstancias es obligatoria la presencia del coordinador en fase de proyecto, quién puede designarlo y cuándo debe realizarlo, quién puede ser coordinador y qué requisitos le son exigibles para serlo, qué funciones tiene encomendadas y cómo puede realizarlas, cómo puede convertir su trabajo en un servicio eficaz y eficiente y cómo puede validar y certificar su trabajo basándolo en un sistema de gestión documental. Y toda esta información recabada de Europa, nos permite evaluar el grado de implantación de esta figura, tanto en España como, comparativamente, en el resto de Europa.