Validez del protocolo actual de cribado para estreptococo del grupo b como predictor de la colonizacion vaginal intraparto

  1. QUILES LOPEZ-CANTARERO, CARMEN
Dirigida por:
  1. Alberto Salamanca Ballesteros Director
  2. Manuel Rosa Fraile Director/a
  3. Alberto Puertas Prieto Director/a

Universidad de defensa: Universidad de Granada

Fecha de defensa: 29 de febrero de 2012

Tribunal:
  1. Alfonso Herruzo Nalda Presidente/a
  2. Juan Mozas Moreno Secretario
  3. María Paz Carrillo Badillo Vocal
  4. Javier Rodríguez Granger Vocal
  5. E. Narbona López Vocal
Departamento:
  1. OBSTETRICIA Y GINECOLOGÍA

Tipo: Tesis

Resumen

El Estreptococo del Grupo B (EGB) constituye en ausencia de medidas preventivas la causa más frecuente de infección bacteriana perinatal de transmisión vertical en el recién nacido, describiéndose tasas de colonización en los recién nacidos de madres portadoras en torno al 50%, con producción de sepsis neonatal precoz hasta en el 3% de los casos (1-4 casos/1000 recién nacidos vivos). Por ello, desde las recomendaciones de los CDC (Centers for Diseases Control) del 2002, que propugnan la realización de un cultivo vaginorrectal para EGB a todas las gestantes entre las semanas 35-37 y la administración de profilaxis antibiótica intraparto a todas las portadoras de la bacteria, se ha reducido la incidencia de infección neonatal precoz del 1,7/1000 nacidos vivos en los años noventa al 0,3-0,4/ 1000 nacidos vivos en la actualidad. Aunque en los últimos años se han estudiado estrategias para la detección rápida de EGB intraparto, mediante el empleo de técnicas moleculares, su implantación en los hospitales supone un alto coste, y en espera de la obtención de una licencia para la comercialización de una vacuna frente a EGB que resulte eficaz y segura para ser empleada en embarazadas, la realización del cribado 5 semanas antes del parto continúa siendo la medida más eficaz hoy día frente a la reducción de la transmisión materno-fetal de EGB. OBJETIVOS: Determinar la validez del cultivo para EGB realizado entre las semanas 35-37 como predictor de la colonización intraparto, empleando el medio Granada y en segundo lugar determinar la influencia de la administración de profilaxis completa o incompleta, así como el número de dosis de antibiótico que recibe la gestante intraparto y el tiempo que transcurre desde la administración de la primera dosis de antibiótico hasta el parto no sólo en la tasa de colonización neonatal sino también el número de localizaciones de colonización neonatal. MATERIAL Y MÉTODOS: Se desarrolló un estudio descriptivo longitudinal formado por una sola cohorte, en el que se comparan y validan los resultados del cultivo para EGB tomado anteparto y el de otro cultivo adicional tomado al ingreso para detectar la colonización vaginal intraparto por EGB y evaluar su concordancia. Se incluyeron a todas las gestantes del área sanitaria del Hospital Virgen de las Nieves de Granada, que ingresaron a través del servicio de urgencias para finalización del parto y que aportaban el resultado del cultivo vaginorrectal para EGB anteparto y los de los urocultivos que se realizan en el seguimiento ordinario del embarazo, excluyendo a las gestantes con embarazo sin controlar. Todas las gestantes portadoras de EGB recibieron quimioprofilaxis intraparto de acuerdo a las recomendaciones de los CDC del 2002. Además a todos los recién nacidos de madres portadoras se les tomaron tres cultivos a nivel ótico, faríngeo y umbilical para EGB. Todas las muestras maternas y fetales se cultivaron en placas o tubos semisólidos de Medio Granada. RESULTADOS: Se incluyeron a 1897 gestantes, resultando colonizadas 399 (21%). Se obtuvo una sensibilidad del Medio Granada para la detección de EGB intraparto del 82,32%, una especificidad del 97,35%, un valor predictivo positivo del 85,91% y negativo del 96,56%, con un 2,2% de falsos positivos y un 2,9% de falsos negativos. Se realizó profilaxis antibiótica intraparto en 283 gestantes portadoras de EGB (93,1%), y resultaron colonizados el 12,7% de los neonatos. En las 21 gestantes portadoras en las que no se realizó profilaxis intraparto (6,9%) se identificó colonización neonatal por EGB en el 19,1% de los casos. La proporción de recién nacidos colonizados se redujo a la mitad de forma significativa, del 16,6% al 8,7% cuando las gestantes portadoras de EGB recibieron profilaxis completa respecto a incompleta. Además se observó una ausencia de neonatos colonizados en dos localizaciones y tres localizaciones de forma significativa cuando se administró profilaxis completa. La incidencia de neonatos colonizados disminuyó del 16,6% al 9,4% cuando las gestantes recibieron dos dosis de antibiótico con respecto a una única dosis, y de hasta el 5,9% con la tercera dosis aunque sin alcanzar significación estadística, pero esta incidencia no tendió a disminuir con la administración de dosis sucesivas de antibiótico. La proporción de neonatos colonizados por EGB se redujo significativamente cuando la quimioprofilaxis se inició al menos dos horas antes del parto. Con respecto al estudio de la colonización múltiple en función del número de dosis de antibiótico y del momento de inicio de quimioprofilaxis hasta el parto, aunque se observó una disminución en todas las localizaciones de colonización neonatal cuando el parto ocurrió con dos horas de antelación desde el inicio de la profilaxis antibiótica, ésta fue indetectable en dos y tres localizaciones a partir de la segunda dosis de antibiótico administrada, es decir, tras cuatro horas de quimioprofilaxis sin alcanzar significación estadística. CONCLUSIONES: El método de cribado para EGB realizado anteparto, empleando el medio de cultivo Granada puede considerarse un método válido por presentar una alta tasa de detección de portadoras de EGB, con unos valores predictivos para detección de portadoras de EGB intraparto óptimos. La administración de profilaxis completa a la madre portadora de EGB intraparto, reduce de forma significativa la transmisión vertical y la colonización múltiple por EGB en el neonato. El inicio de la quimioprofilaxis al menos dos horas antes del parto reduce significativamente la colonización neonatal, y tras cuatro horas, es decir, a partir de la segunda dosis, hay una tendencia no significativa a la ausencia de colonización múltiple por EGB a nivel neonatal.