Dendroclimatología isotópica en el sur de la península ibéricaimplicaciones paleoclimáticas y paleohidrológicas

  1. Granados Páez, Sonia
Dirigida por:
  1. Antonio Delgado Huertas Directora

Universidad de defensa: Universidad de Granada

Fecha de defensa: 02 de marzo de 2011

Tribunal:
  1. Regino Zamora Presidente
  2. Emilio Reyes Camacho Secretario/a
  3. Trinidad de Torres Pérez-Hidalgo Vocal
  4. Fernando Valladares Ros Vocal
  5. Fernando Hiraldo Cano Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

El Holoceno (últimos 10.000 años), constituye uno de los períodos climáticos más estables del último millón de años, una línea recta en la historia climática del Cuaternario. Sin embargo, incluso en este período extremadamente estable, en las últimas décadas se han sucedido numerosos eventos climáticos extremos (Conway, 1998) que han supuesto máximos o mínimos absolutos dentro del registro instrumental. Este hecho ha desatado las alertas de buena parte de la comunidad científica así como de diversos organismos nacionales e internacionales, sobre la posibilidad de que estemos asistiendo a un momento de alteración de los parámetros climáticos, que podría interferir en la conservación de los ecosistemas naturales, así como en las infraestructuras y en el desarrollo de las actividades antrópicas sobre el territorio. A partir de la Revolución industrial, la influencia del factor antrópico sobre el sistema climático, empieza a ser apreciable según el Panel Intergubernamental para el Cambio Climático-IPCC (Houghton et al., 1996; Houghton et al., 2001; IPCC 2007). En este sentido, la Península Ibérica, por su situación geográfica, es especialmente vulnerable a las consecuencias del cambio climático, ya que está en una zona intermedia entre latitudes templadas y tropicales, donde existen ambientes semidesérticos, mediterráneos, atlánticos y de alta montaña. Además, ya ha sido señalada, como zona especialmente sensible, por el IPCC 2007, para la que se pronostica un aumento de los fenómenos extremos como la disminución de las precipitaciones y el aumento de las temperaturas, que en conjunto puede suponer una disminución superior al 40% en el agua de escorrentía. Todo esto, unido al déficit hidrológico que manifiesta el sur de la Península Ibérica, hacen que el estudio de la evolución del clima y de los factores que le afectan a escala regional, sean de gran importancia para la previsión de cambios climáticos futuros. Para lograr este objetivo, además de la información climática instrumental, que en el mejor de los casos no pasa de un siglo y medio en España, necesitamos de otros métodos (métodos paleoclimáticos) que nos ayuden a conocer los momentos anteriores a la masiva intervención antrópica en el sistema climático. Por otra parte, incluso disponiendo de datos climáticos relativamente abundantes durante los últimos 50 años, resulta difícil cuantificar su efecto real sobre determinados ecosistemas. Una de las técnicas con mejores resultados para la reconstrucción del clima de los últimos milenios es la dendroclimatología, cuyo fin es extraer la información climática a partir de las características que presentan los anillos de crecimiento de los árboles utilizados para generar las cronologías (dendrocronología) (Glock, 1955; Fritz, 1966; Eddy, 1977; Schweingruber, 1988; Cook, 1995). Este método presenta la gran ventaja de poder proporcionar información objetiva y cuantitativa (temperatura y precipitación) de los últimos siglos, con una resolución temporal anual e incluso intraanual, con la única limitación que supone la longevidad de los árboles usados en la cronología. Sin embargo, la dendroclimatología tiene el inconveniente de que el clima no es el único factor que afecta a la anchura de los anillos, ya que ésta puede estar influenciada por otros factores no climáticos (plagas de insectos, incendios forestales, etc.) que pueden interferir en la señal climática que se obtiene al observar el crecimiento anual de los árboles. Por otro lado, se sabe que los factores climáticos como la cantidad de precipitación, temperatura, humedad relativa del aire, etc. influyen sobre la composición isotópica de los componentes que forman estos anillos de crecimiento (Edwards y Fritz, 1986; Ramesh et al., 1986a; Switsur et al., 1996; Anderson et al., 1998; Heaton, 1999; McCarroll y Loader 2004, 2005; Treydte et al,, 2006), lo que esta aportando un enorme potencial a esta línea de investigación. A pesar de su interés, la dificultad analítica de esta técnica ha conducido a que, incluso a escala internacional, el número de artículos aún sea relativamente escaso, especialmente los que usan las razones isotópicas de hidrógeno y oxígeno. En este contexto, se ha iniciado una nueva línea de investigación en el grupo que está especialmente centrada en el estudio de los isótopos estables en los anillos de árboles (dendroclimatología isotópica) de especies del sur de la Península Ibérica, que es el objeto de esta tesis doctoral. Una de las ventajas de esta técnica, es que nos permite un conocimiento más detallado de los factores que afectan al crecimiento de los árboles a través del estudio de los procesos que influyen en la asimilación del carbono, hidrógeno y oxígeno de los componentes que forman el anillo. Por tanto, el análisis y estudio de isótopos estables en anillos de árboles nos aporta información integrada y precisa sobre las tendencias climáticas pasadas con una resolución anual e incluso intraanual y resulta especialmente útil para el estudio de eventos climáticos recientes como puede ser la Pequeña Edad del Hielo o cuantificar los efectos del Cambio Global a escala regional. Esta información aporta nuevas perspectivas sobre como están siendo afectados los espacios protegidos por el Cambio Global lo que afecta a sus estrategias de manejo, o que medidas deberán tomarse en agricultura, red de infraestructuras hídricas, etc. ante los posibles escenarios futuros del clima en la Península Ibérica y, en general, en el entorno peri mediterráneo.