El 'Edificio Parque' de Vázquez de Castro e Iñíguez de Onzoño: Una atalaya habitada frente al puerto de Almería.

  1. García-Sánchez, José Francisco
Libro:
Pioneros de la Arquitectura Moderna Española: Análisis Crítico de una obra
  1. Teresa Couceiro Núñez (coord.)

Editorial: Fundación Alejandro de la Sota

ISBN: 978-84-608-7409-6

Año de publicación: 2016

Páginas: 333-343

Congreso: Congreso Pioneros de la Arquitectura Moderna Española (3. 2016. Madrid)

Tipo: Aportación congreso

Resumen

En la década de 1960, la ciudad de Almería sufre una transformación urbana fruto del desarrollismo económico liberal impulsado, en parte, por la actividad inmobiliaria privada que empieza a sustituir al Estado en la construcción de la ciudad. El centro histórico, a los pies de la Alcazaba y presidido por la Catedral, no se libra de la especulación, y el paisaje urbano tradicional formado por casas unifamiliares de cubierta plana empieza a ser sustituido por altos edificios cuya rentabilidad era un requisito previo e ineludible. El 'Edificio Parque' (1967-1970), obra de los arquitectos Antonio Vázquez de Castro (Madrid, 1929), José Luis Íñiguez de Onzoño Angulo (Bilbao, 1927) y Manuel Sierra Nava (Madrid, 1923-2007) y situado en la primera línea frente al puerto, ocupa la manzana en esquina comprendía entre el Parque de José Antonio y la calle Queipo de Llano —hoy Parque Nicolás Salmerón y calle de la Reina. En el ante-proyecto (1967) el conjunto estaba formado por 4 bloques dispuestos en 4 parcelas cuya superficie total se medía en 2.892 m2 y donde se proyectaban 46 viviendas y 62 apartamentos, aunque finalmente sólo se construyó en la parcela de la esquina: un bloque con sus dos fachadas principales mirando al sur y a levante, y abierto a un patio a poniente, con dos pequeñas medianeras que le ponían en contacto con la trama urbana. Este bloque estaba formado por una planta baja a modo de pódium que ocupaba toda parcela y estaba destinada a locales comerciales y garaje cuyo acceso se realiza por el Parque. Desde la Calle Queipo de Llano —elevada 3,90 sobre el Parque— se produce el acceso a una torre casi exenta, de 10 niveles y un ático, retranqueada 9,20 m, cuyo soportal estaba ocupado por locales comerciales y, sobre él, desde la 2ª hasta la 8ª planta se distribuyen 14 viviendas —dos por nivel— de 4 dormitorios y en las dos últimas plantas, 12 apartamentos de 1 dormitorio; además de un ático para la maquinaria del ascensor y la vivienda del portero. El perímetro exterior de la torre se duplica formado por: un cerramiento interior formado por ladrillo y vidrio, un cerramiento exterior formado por persianas de librillo, y unos espacios intermedios, cubiertos pero ventilados y herederos de la tradición mediterránea, donde se sitúan las grandes terrazas del estar comedor además de otras menores vinculadas a los dormitorios. La estructura se dispone retranqueada, quedando la fachada formada por grandes bandas horizontales: la de las persianas de librillo intercalada con otra de piedra caliza local. El 'Edificio Parque' sigue todavía seduciendo a quien se acerca a la ciudad de Almería desde la carretera de Málaga. Su volumen nítido, a los pies de la Alcazaba, esconde la contradicción que toda torre moderna soporta: por un lado se apodera del paisaje imponiéndose y, por otro, sirve de atalaya para que el hombre, desde arriba, disfrute de ese paisaje urbano, del Puerto de Almería y del mar Mediterráneo.