Hábitos saludables en la primera adolescencia y efectos del programa de intervención enfermera"aprendo y adquiero hábitos saludables

  1. MIRAVALLS TORRES, RAQUEL
Dirigida por:
  1. Ana Pablos Monzó Director/a

Universidad de defensa: Universidad Católica de Valencia San Vicente Mártir

Fecha de defensa: 17 de julio de 2020

Tribunal:
  1. Rafael Guisado Barrilao Presidente
  2. Rafael Vila Candel Secretario/a
  3. Concepción Ros Ros Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 631245 DIALNET

Resumen

Podemos asegurar que la Salud es muy preciada en las sociedades desarrolladas, pero es cierto que conseguirla y mantenerla requiere seguir determinadas conductas que afectan de manera positiva a la salud. Las conductas, así como los hábitos, en la mayoría de las ocasiones son inconscientes y se han aprendido e incorporado desde la niñez, se justifica así la importancia de educar en hábitos saludables desde la infancia tanto en alimentación como en práctica de actividad física y en evitar ciertas conductas asociadas al consumo de sustancias nocivas para nuestra salud. Asumiendo la importancia que supone contar con diferentes agentes educadores y promotores de la salud, en esta tesis se han realizado dos estudios íntimamente relacionados que valoran hábitos de salud. El primer estudio titulado “ESTUDIO DESCRIPTIVO DE LOS HÁBITOS Y VARIABLES RELACIONADAS CON LA SALUD EN UNA MUESTRA DE ESCOLARES DE 5º Y 6º DE PRIMARIA DE LA COMUNIDAD VALENCIANA” es un estudio descriptivo mediante el que se pretende determinar la situación antropométrica, la condición física y los hábitos de salud de una muestra de escolares de la Comunidad Valenciana y, posteriormente, considerar las diferencias que puedan existir en relación al género. Se han estudiado grupos de escolares de edades comprendidas entre los 10 y 12 años de las tres provincias: Castellón, Valencia y Alicante, todos ellos en colegios públicos con alumnos de un nivel socioeconómico medio según el índice socioeconómico y cultural (ISEC) utilizado para realizar el informe PISA a nivel europeo. La muestra estuvo formada por un total de 497 adolescentes. Tenía por objetivos, determinar las diferencias por género en variables del estilo de vida y de la condición física y verificar los determinantes relacionados con el estilo de vida y la condición física. Las variables analizadas fueron el IMC, variables de condición física (agilidad, flexibilidad y capacidad cardiorrespiratoria), y variables de hábitos de salud (calidad y frecuencia alimentaria, práctica de actividad física, sedentarismo y descanso nocturno). Tras analizar los resultados obtenidos en el primer estudio llegamos a las conclusiones siguientes: Los chicos de 5º y 6º de primaria de la muestra analizada tienen un IMC similar al de las chicas de su misma edad. Los chicos de 5º y 6º de primaria obtienen peores valores de calidad y frecuencia alimentaria y realizan más actividad física que las chicas de su misma edad. Los chicos de 5º y 6º de primaria tienen niveles mayores en resistencia, inferiores en flexibilidad y similares en fuerza y agilidad que las chicas de su misma edad. Los chicos de 5º y 6º de primaria tienen unos valores de Tensión Arterial similares y unos valores de VO2 max mejores que las chicas de su misma edad. La calidad del desayuno, el sedentarismo de pantalla, la agilidad y el VO2 max predecirán el IMC para la muestra total. La calidad del desayuno, los minutos de actividad física, la agilidad y el VO2 max predecirán el IMC para la muestra de chicos. La calidad del desayuno, la agilidad y el VO2 max predecirán el IMC para la muestra a de chicas. El segundo estudio titulado “ESTUDIO DE LOS EFECTOS DE UN PROGRAMA DE INTERVENCIÓN “APRENDO Y ADQUIERO HÁBITOS SALUDABLES” (AYAHS) EN ESCOLARES DE 5º Y 6º DE UNA ZONA BÁSICA DE SALUD” se trata de un estudio cuasi-experimental, con dos grupos paralelos, con mediciones pre-post intervención. La muestra quedó conformada por 144 estudiantes repartidos en grupo control (GC; n=65) y grupo intervención (GI; n=79). Las variables que se valoraron fueron los conocimientos y los hábitos de salud (calidad y frecuencia alimentaria, actividad física, sedentarismo y descanso nocturno). Tuvo por objetivo determinar los efectos de un programa de promoción de hábitos saludables impartido por la enfermera comunitaria sobre los hábitos y conocimientos de salud en escolares de 5º y 6º de primaria. El programa AYAHS nace de la inquietud enfermera por ayudar al aprendizaje y adquisición de hábitos saludables en la población de 10 a12 años en el contexto escolar. Inquietud motivada desde la consulta de Atención primaria, principalmente debido al incremento del sedentarismo y obesidad en los adolescentes al igual que el consumo de ciertas sustancias nocivas como tabaco y alcohol desde edades cada vez más tempranas. Este programa fue diseñado para llevarlo a cabo en niños de 10 a 12 años o primera adolescencia, ya que es en este periodo cuando se aprenden y adquieren los hábitos y estilos de vida saludables y está pensado para que se desarrolle en el centro escolar y sea llevado a cabo por una enfermera comunitaria, con la esperanza de que en un futuro sea la enfermera escolar la encargada de llevarlo a cabo, con la colaboración del profesorado del centro escolar. La Enfermera Escolar es el profesional capacitado para proporcionar cuidados de enfermería especializados de forma autónoma, durante la infancia y adolescencia, en el Ámbito Educativo, incluyendo la promoción de la salud, la prevención de la enfermedad y la asistencia al niño o adolescente sano o enfermo y su rehabilitación. Mediante este estudio se quiere probar la importancia del papel de la enfermera comunitaria en el aula, y por consiguiente el de la enfermera escolar, ya que esta figura dedicaría más horas a todo el programa y tendría un mayor conocimiento del alumnado y de su evolución. Los objetivos específicos del Programa AYAHS fueron conseguir una mejora de conocimientos en materia de Hábitos saludables, la adquisición de Hábitos saludables y demostrar que la figura de la enfermera escolar es fundamental para conseguir los objetivos anteriores. Las primeras intervenciones hablan de la actividad física y el descanso, posteriormente se dedican a la alimentación y finalmente se tratan las consecuencias del consumo de tabaco y alcohol. Para evitar diferencias entre intervenciones todas ellas han sido administradas por la misma enfermera consensuando con los tutores de los cuatro cursos el horario durante 8 semanas. La metodología empleada fue la siguiente: 1º Lectura por parte de los alumnos de una introducción al tema que se iba a tratar. 2º Tormenta de ideas a partir de la lectura realizada. 3º Realización de alguna actividad conjunta. Estas actividades eran muy variadas, y se buscaba que fueran divertidas para poder captar la atención se los niños y que los aprendizajes fueran mayores. Se utilizaban actividades como sopas de letras, recortables, juegos de diferencias, retos, puzles, vídeos… 4º Corrección de la actividad y aclaración de cualquier duda al respecto. 5º Explicación del material que tenían que realizar o finalizar en casa Pedagógicamente se ha intentado reunir unas premisas como son la diversión y entretenimiento, participación en grupo y cooperación con los amigos y las familias. Tras analizar los resultados obtenidos en el presente estudio llegamos a las conclusiones siguientes: Tras el programa AYAHS el grupo experimental obtuvo una mejora en las variables antropométricas (peso y talla) de los conocimientos en hábitos de salud, en las variables calidad y frecuencia alimentaria, en las variables de condición física (flexibilidad y resistencia) en la variable fisiológica VO2 max en comparación con el grupo control.. Después de la intervención encontramos diferencias estadísticamente significativas en la prueba de conocimientos (p<0,01) y en la calidad (p<0,05) y frecuencia (p<0,05) alimentaria de los alumnos incluidos en el GI. No hubo cambios significativos (p>0,05) en las horas semanales de práctica de actividad física, de sedentarismo y de descanso nocturno. Tras la intervención se observa que un 67,1% del alumnado del GI pasa menos de 2 horas sedentarias al día frente al 55% del GC. En cuanto a la práctica de actividad física, el 63,3% del alumnado del GI realizaba más de 60 minutos/día tras la intervención frente al 58,5% del GC. En conclusión, en el primer estudio los hallazgos apoyan la necesidad de desarrollar estrategias nacionales de promoción de hábitos saludables desde la niñez cuyos pilares sean la realización de una dieta saludable, la disminución del tiempo de sedentarismo, especialmente de pantallas, y la práctica de actividad física a intensidades vigorosas que permitan un aumento del consumo máximo de oxígeno y una mejora de la agilidad. En el segundo estudio la educación para la salud (EPS) proporcionada por la enfermera comunitaria en el colegio mejora los conocimientos en hábitos saludables y, como consecuencia, los hábitos de salud de los alumnos. Esto nos lleva a hipotetizar que la figura de la enfermera escolar podría ayudar a mejorar estos hábitos en mayor medida.