La naturaleza de la arquitectura. La arquitectura de la naturaleza
- Eduardo Mosquera Adell Director
Universidade de defensa: Universidad de Sevilla
Fecha de defensa: 27 de setembro de 2017
- Esteban Ruiz Ballesteros Presidente/a
- Juan José Vázquez Avellaneda Secretario/a
- José Ramon Moreno Vogal
- José María Romero Martínez Vogal
- Juan Manuel Domingo Santos Vogal
Tipo: Tese
Resumo
La naturaleza de la arquitectura. La arquitectura de la naturaleza, utiliza el juego semántico del quiasmo o retruécano, mediante la inversión locacional de las cinco palabras que constituyen una frase, y la intención de generar dos frases similares sintácticamente a la vez que muy contrastadas semánticamente. El proceso se genera mediante la reorganizando por inversión de los diferente términos de una oración en otra subsiguiente cambiando significativamente su sentido respecto de la primera. Son las palabras Naturaleza y Arquitectura sobre las que gravita el sentido de las dos frases y también de esta tesis. Naturaleza en su condición polisémica por la pluralidad de significados que en sí entraña y Arquitectura como el sujeto identitario en el que las huellas polisémicas de la primera quedan impresas. Más allá de esta construcción simbólica, “La Naturaraleza de la Arquitectura”, pretende expresar qué constituye hoy lo que llamamos arquitectura, su esencia, su significado actual, su sentido, su uso, de qué está hecha y cómo ha logrado construirse así. La palabra Naturaleza expresa aquí el principio generador, el proceso evolutivo y la propiedad de la cosa a la que asigna. Constituye la Carta de Naturaleza de la arquitectura o lo que es lo mismo lo que se adquiere con el tiempo sin que en principio le corresponda por nacimiento o herencia. Lo que se ha ganado a pulso en definitiva. Muy al contrario La Arquitectura de la Naturaleza, atiende al futuro y no al presente ni al pasado. Constituye lo que se espera, se sueña y se desea aunque pueda parecer un imposible. Aquí la palabra Naturaleza actúa como sujeto de derecho, como entidad significativa, autónoma, adscrita a sus propias leyes y designios. La Arquitectura de la Naturaleza quiere expresar la superación de la relación difícil mantenida entre ambas a lo largo de la historia y la supresión de la condición hegemónica de la primera sobre la segunda. De esta forma el ámbito de estudio en el que se mueve la tesis es éste, el que generan estás dos oraciones tan contrastadas, tan semánticamente distintas pero a la vez complementarias. Dos ámbitos con temporalidades opuestas pero superpuestas, dos formas de ser, hacer y conocer el territorio hoy antitéticas. Así la primera parte de esta tesis, investiga por qué la arquitectura hoy ejerce en el territorio unas dinámicas territoriales adscritas a los procesos globalizadores, cuáles han sido sus fundamentos y los procesos tanto filosóficos, científicos y arquitectónicos que los han guiado, también la situación actual, nuestra responsabilidad crítica en ella y el futuro que se avecina de seguir con éstas. Esta primera parte la desarrolla fundamentalmente el capítulo 3: Dinámicas Territoriales Globales Contemporáneas. La segunda parte de la tesis, parte de la noción de deseo y de los significados que la propia palabra entraña. Deseo de que las cosas cambien, deseo de vivir y habitar mejor en relación a la Naturaleza y a los argumentos que ella esgrime. Deseo de apoyar la diversidad y de luchar contra la homogenización, abstracción, geometrización del espacio físico, que convierten al territorio en una tabula rasa para la inscripción de arquitecturas y modelos productivos y económicos globalizantes. Deseos de que la arquitectura cambie sus formas de hacer y que éstas logren insertarse de nuevo en las dinámicas de la Naturaleza de forma creativa y propositiva como bien sabe hacer. Deseo y esperanza de que los arquitectos cambiemos nuestras pautas conductuales en el ejercicio de nuestra profesión y aprendamos un nuevo lenguaje del territorio sustituyendo aquellos que hemos construido fundamentalmente a partir del siglo XVII, que han sido el caldo de cultivo en el que nos hemos formado muchos de nosotros y que hoy de forma imprevista siguen más que nunca vigentes. El capítulo 4 desarrolla esta segunda parte, intentando construir cómo es ese lenguaje de la construcción del territorio utilizando como caso de estudio un ámbito amplio y diverso, conformado por las prácticas cotidianas y formas del vivir y habitar de lo que los antropólogos Philips Descola y Arturo Escobar denominan como Modelos de la Naturaleza. Se trata de grupos socioculturales que están repartidos por todos los socioecosistemas del planeta, África Ásia, Oceanía, Latinoamérica… y exiguamente en Europa. Que tejen naturaleza al tiempo que desarrollan sus procesos de vida, por lo que estos se inscriben de forma natural en las dinámicas propias de ésta. Territorios de Diferencia a la vez que de Resistencia y de lucha por lo local frente a lo global. La importancia de éstos, no debe ser vista como mero hecho de conservación de unas formas de vida únicas, que también, sino además como fundamento del cambio, como posibilidad para transformar otras dinámicas más destructivas con el territorio, de aquí que constituyan la base sobre la que esta tesis encuentra refugio final, porque constituyen lo diverso lo diferente, lo no reglado, lo anormal, lo antisistema. En el estudio de sus formas de comportamiento respecto al territorio es donde creo pueden estar las claves y las estrategias donde la nueva arquitectura o arquitectura en tránsito debe inspirarse. El capítulo 4 es esto lo que pretende, desmadejar el ovillo, desenredar los hilos de la red que tejen la cultura del territorio porque ésta constituye el ecosistema total de los saberes de una población con los que piensan, significan y construyen sus territorios. También consciente de que todos ellos se conforman dentro de un Todo enmarañado como dice el antropólogo Tim Ingold o conformando un tejido “Complexus” cuya complejidad reside en estar tejido en conjunto como apunta el antropólogo Edgard Morin. Para el desarrollo del tercer y cuarto capítulo he necesitado previamente comprender que es la cultura del territorio, cómo se construye, porqué es importante en las relaciones sujeto entorno y cual es su utilidad. De la mano de la antropología he podido constatar cómo todo lo que se hace en el territorio, unido a los conocimientos, a las formas de aprehensión de la realidad, a las formas de sentir y pensar, a las cosmologías o formas de entender el mundo en todos sus niveles: humano, no humano y supernatural, a las formas de entender el tiempo y el espacio a cómo nos expresamos relacionalmente, a las cosa que pensamos y hacemos, a los saberes y significados que ello entraña, conforman la cultura del territorio. En las relaciones individuo-territorio la cultura juega un papel importantísimo, porque refleja la forma en que pensamos y hacemos en él. Para saber la importancia por lo que ésta expresa nuestra relación con él como individuos o colectividad. Esto es lo que estudia de forma general el capítulo 2. El entendimiento de los mecanismos que construyen las percepciones y conocimientos con los cuales aprehendemos la realidad, el entorno en definitiva. Y como el conjunto de éstos conforma la formas de relacionarnos con la otredad Los conocimientos para explicar para stomar consciencia de que la cultura es todo, tanto la global como todos estas locales sólo que la primera es única, homogénea, impositiva y fuera de las lógicas y significados que construye el individuo y la otra es diversa, diferenciada, adaptada a un territorio en el que tiene sentido. El capítulo 5, se formula como conclusión. a dos formas de habitar y en consecuencia dos formas de proyectar y hacer arquitectura. Constituye la pantalla donde proyectar una nueva mirada, una mirada personal, que me ha servido fundamentalmente para darle sentido y cuerpo a las cosas que hago día a día en mi profesión.