Trasgresión y tradición en la obra bíblica de Marc Chagallanálisis e interpretación de las 17 pinturas del Museo Nacional Mensaje Bíblico Marc Chagall como signo y como hecho de comunicación

  1. Galindo Ocaña, Esperanza
Dirigida por:
  1. Alberto Mañero Gutiérrez Director/a

Universidad de defensa: Universidad de Sevilla

Fecha de defensa: 29 de abril de 2005

Tribunal:
  1. Juan Carlos Arañó Gisbert Presidente/a
  2. Carmen Andreu-Lara Secretario/a
  3. Carlos Colón Perales Vocal
  4. Carlos Plasencia Climent Vocal
  5. Miguel Ángel Espinosa Villegas Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 126274 DIALNET lock_openIdus editor

Resumen

Análisis de la obra pictórica del Museo Nacional Mensaje Bíblico Marc Chagall, como un signo artístico aplicando la metodología lingüístico-literaria dentro de la concepción de la obra artística como parte de un hecho de comunicación. Al leer el Mensaje Bíblico Marc Chagall, desde esta perspectiva se desciende desde el nivel más externo de la instancia de la expresión al más profundo de la sustancia del contenido, para descubrir que hay un mecanismo creativo propio de Chagall, que aplica transgresión partiendo de la tradición. El objetivo de este trabajo determinará la metodología. Puesto que no se trata de un estudio histórico-crítico, sino desde la experiencia y la sensibilidad de las Bellas Artes; utilizaré un corpus de obras limitado, bastante rico, pero en absoluto exhaustivo. Ya el principal estudioso de la obra de Chagall vio la dificultad de catalogar la obra completa, estando en una situación privilegiada por ser yerno del pintor. Voy a seguir básicamente las directrices de la comunicación que realicé en el Congreso INARS. La investigación en las artes plásticas y visuales titulada �El Arte como comunicación. Apuntes para una metodología en el estudio de la obra artística�. Los que participamos directamente en la tarea de crear o de explicar arte también necesitamos abordar las artes plásticas desde una perspectiva de investigación y reflexión rigurosa. Una cosa es la creación plástica �totalmente libre, donde lo importante es la trasgresión de las normas y la ilimitada combinación libre o creatividad- y, otra, la investigación científica de las artes plásticas. Hay que reconocer de todas formas el mérito de los historiadores del arte, cutos estudios concretos tanto han iluminado y deleitado nuestras reflexiones. Mi objetivo es reflexionar desde mi punto de vista sobre la investigación y metodología en arte. Pienso que crear una �ciencia del arte� o una �ciencia del espíritu� que se ocupe del arte, consistiría en lograr una terminología lo más convencional y congruente posible para poder dialogar sobre las cuestiones artísticas. En el fondo, siempre que se habla en ciencias del espíritu no hacemos más que ejercitar la función metalingüística del lenguaje, pues como la filosofía tratamos de explicar el significado de los términos, de lo que decimos sobre el hombre. Mi horizonte interpretativo es el del artista, no del filósofo, ni del sociólogo, antropólogo o historiador. Dicen que el pintor, el artista no tiene otra misión que la de crear, hacer, �zapatero a tus zapatos�. Como si el artista fuera un �artesano�, que no se plantea otros problemas que la técnica, la fábrica. Si el artista puede hablar, pensar, que hable. Nada hay más enriquecedor que leer lo que dicen los artistas. Nada me hizo comprender a Rodin mejor que sus Conversaciones reunidas por Paul Gsell; a Matisse, sus Escritos y opiniones sobre el arte; a Jean Dubuffet, con El hombre de la calle ante la obra de arte; a Kandisky, Tapies, M. Rivera, etc. que sus propias palabras. Estas y otras páginas son las que más me han acercado a la experiencia del arte desde el punto de vista de la reflexión. Admiro la labro de los filósofos y pienso que es su competencia el teorizar sobre el concepto del arte y sin duda somos muchos los que soñamos con sistematización para el estudio y profundización del campo semántico del arte, ya que es un fenómeno complejo. Así como el poeta se crece cuando domina el lenguaje, el artista tiene derecho a bucear en las páginas de la ciencia o la filosofía. Además, así como un poeta que se introduce por los mares de la física es capaz �aunque desvaríe- de crear algo genial, e arte también puede producirse �binomios fantásticos� (Rodari). Conviene salir de este mundo de fragmentos, pero, lógicamente, como deudora de mis lecturas y sensibilidad, me sitúo en una perspectiva filolingüística. Pienso que para abordar las artes plásticas desde una perspectiva científica es necesaria una reducción terminológica, para poco a poco ir sistematizando esta disciplina. La creación plástica se dan en un terreno de libertad, trasgresión e ilimitada combinación libre, es decir, de creatividad; pero la investigación exige rigor. Y una ciencia humana que lleva bastante ventaja es la lingüística y todas las reflexiones sobre el lenguaje. Hay que tener en cuenta que todavía estamos padeciendo la laguna que hubo en la filosofía griega acerca del arte; Platón, sin embargo, ya se preocupó del lenguaje y Aristóteles de la Poética. Aunque en principio eran normativas y preceptivas (la oratoria, el derecho, la tragedia� contribuyeron a la creación de estas disciplinas). Todavía cuestionamos hasta el mismo contenido del término arte. De la lingüística he traído una serie de términos que van ayudar en esta investigación a interpretar la obra de arte.