Evaluación histológica e histomorfométrica sobre implantes inmediatos colocados en perros beagle con una nueva superficie tratada

  1. RODRIGUEZ BARBA, Cristina
Dirigida por:
  1. José Luis Calvo Guirado Director/a
  2. Antonio José Ortiz Ruiz Director/a

Universidad de defensa: Universidad de Murcia

Fecha de defensa: 30 de julio de 2010

Tribunal:
  1. Carlos Labaig Rueda Presidente/a
  2. Rafael Arcesio Delgado Ruiz Secretario/a
  3. Juan Carlos Baguena Gómez Vocal
  4. Gerardo Gómez Moreno Vocal
  5. Javier Guardia Muñoz Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 112693 DIALNET

Resumen

El objetivo principal de este estudio era evaluar la aposición ósea, la reabsorción de la cresta ósea y la profundidad del primer contacto hueso-implante comparando implantes de superficie modificada con implantes de superficie estándar en maxilar y mandíbula de perros beagle. En este estudio experimental, se extrajeron las raíces distales de tres dientes de forma bilateral en seis perros beagle y se colocaron 12 implantes inmediatos en cada perro. Los perros se sacrificaron a los 15, 30 y 90 días. En cuanto a la reabsorción ósea de las paredes bucal y lingual en los implantes de superficie tratada se observó que a los 15 días aparecía una mayor reabsorción en la pared lingual que en la pared ósea bucal (0,71±0,48 mm; 0,46±0,48 mm, respectivamente). A los 30 días también fue mayor la reabsorción ósea en la pared lingual (1,29±0,48 mm) que en la bucal (0,91±0,48 mm), no siendo así a los 90 días en donde se observó mayor reabsorción ósea en la pared bucal (2,18±0,48 mm) que en la lingual (2,08±0,48 mm). En los implantes del grupo control, a los 15 días se observó mayor reabsorción ósea en la pared bucal (1,47±0,48 mm) que en la lingual (0,99±0,48 mm), igual que sucedió a los 30 días (1,97±0,48 mm y 0,98±0,48 mm, respectivamente). Finalmente, a los 90 días se observó mayor reabsorción ósea en la pared lingual (2,73±0,48 mm) que en la bucal (1,33±0,48 mm). No aparecen diferencias significativas en ninguno de los grupos (p<0,05). En cuanto al estudio del primer contacto hueso-implante, aparecen diferencias estadísticamente significativas en las muestras obtenidas a los 30 días en el grupo de estudio en la pared lingual, con una profundidad de contacto de 2,01±0,99 milímetros en el grupo de estudio y 1,74±0,91 milímetros en el grupo control. La pared bucal del grupo de estudio presenta una profundidad de contacto de 1,03±1,38 milímetros y la pared bucal del grupo control una profundidad de 2,96±2,19 milímetros. Para el resto de muestras no aparecen diferencias significativas (p<0,05). Finalmente, en cuanto al estudio del contacto hueso-implante (BIC), también se observan diferencias significativas en el grupo de estudio en la pared lingual a los 30 días con un porcentaje del 49,01±1,4%, siendo en el grupo control en la pared lingual del 38,01±1,6%. En la pared bucal del grupo de estudio se observa un 38,33±1,8% y en el grupo control un 36,83±1,6%. En el resto de muestras no se aprecian diferencias estadísticamente significativas (p<0,05). Estos resultados mostraron una mayor aposición ósea y menos reabsorción de la cresta ósea a los 30 días en la zona de los implantes de superficie tratada que en los de superficie estándar. Esta superficie acondicionada puede reducir el periodo de cicatrización e incrementar la aposición ósea cuando se colocan implantes inmediatos.