Impacto de un programa educacional en la sepsis grave y shock séptico

  1. Salazar Ramírez, Cristina
Dirigida por:
  1. Inmaculada Bellido Estévez Director/a
  2. María Victoria de la Torre Prados Director/a

Universidad de defensa: Universidad de Málaga

Fecha de defensa: 20 de noviembre de 2007

Tribunal:
  1. Manuel García Morillas Presidente
  2. Miguel Ángel Prieto Palomino Secretario/a
  3. A. García Alcántara Vocal
  4. Maria Eugenia Yuste Ossorio Vocal
  5. Aurelio Gómez Luque Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 169122 DIALNET

Resumen

La sepsis asociada a disfunción orgánica aguda, definida como sepsis grave por la conferencia de consenso SCCM/ESICM/ACCP/ATS/SIS tiene una elevada incidencia y sigue siendo una de las primeras causas de mortalidad, a pesar de las continuas mejoras que se producen en la asistencia a los pacientes críticos. La mortalidad de la sepsis grave se encuentra entre el 28 y el 50% en los diferentes trabajos publicados, dependiendo del tipo de microorganismo causal, el lugar de la infección, edad, sexo, cormobilidades, gravedad de la enfermedad y genotipo del paciente. Estas cifras de incidencia y mortalidad de la sepsis grave superan las de otras enfermedades con un gran impacto social como el cáncer de mama o el SIDA. Determinar el impacto del programa educacional Sobrevivir a la Sepsis en la mortalidad de los pacientes con sepsis grave y shock séptico en el medio hospitalario. Se ha realizado un estudio prospectivo, cuasi-experimental con una antes-después sin grupo control en 310 pacientes reclutados en once hospitales de cualquier sexo y más de 18 años con criterios sepsis grave o shock séptico que ingresen en la UCI. En ellos se recogió edad, sexo, APACHE-II, procedencia (Urgencias, Planta o UCI), tipo de paciente (médico, quirúrgico urgente, quirúrgico programado, politrauma, coronario), origen de la sepsis, nº disfunciones orgánicas, fecha y hora ingreso hospital y en UCI, fecha alta UCI y hospital, lactatos, hemocultivos, administración antiinfecciosos, corticoides y drotecogina alfa activada, aporte de volumen y drogas vasoactivas. El programa educacional "sobrevivir a la sepsis" incrementó la supervivencia al alta de la unidad de cuidados intensivos respecto a las cifras previas a la implantación del programa (un 17,8%, factor de 1,93). El orden de eficacia de los servicios hospitalarios que iniciaron el protocolo de diagnóstico-tratamiento de sepsis en incrementar la supervivencia al alta de la de la unidad de cuidados intensivos fue urgencias con un 20,4%, seguido de los servicios reunidos como planta con un 14,2% y de la UCI con un 9,3%. El programa educacional "sobrevivir a la sepsis" incrementó, aunque no significativamente, la supervivencia al alta de hospitalaria en un 12,8% respecto a las cifras previas a la implantación del programa educacional. El orden de eficacia de los servicios hospitalarios fue similar al detallado en la disminución de la incidencia de mortalidad al alta de UCI. El entrenamiento en el programa educacional durante un mes aumentó la eficacia del programa en la supervivencia de los pacientes tanto en el alta de UCI como en el alta hospitalaria, especialmente en los pacientes procedentes de urgencias. La utilización del programa educacional consiguió un acortamiento de los tiempos de estancia en el hospital de los pacientes que sobrevivían a la sepsis cuando el diagnóstico de ésta se realizaba en urgencias. Aunque los resultados obtenidos hasta el momento indican la utilidad del programa educacional, se precisa la implantación de esta guía de práctica clínica en un mayor número de profesionales sanitarios y su aplicación a una mayor cantidad de pacientes para asegurar la utilidad de este programa educacional sobre las medidas a realizar en caso de sepsis grave y shock séptico. Las guías de práctica clínica cuentan cada vez con más apoyo de las organizaciones científicas y de las instituciones sanitarias y suponen una mejora de la asistencia sanitaria. Pero es imprescindible que estas guías, sean aceptadas en todos sus puntos por el personal facultativo con actividad asistencial responsable de la atención directa de los pacientes para poder obtener un cambio eficaz en la práctica clínica diaria. Para conseguir este punto, estas guías deben ser preparadas para que sean fácilmente conocidas y aplicadas. Deben ser objeto de una difusión extensa y no limitada a los servicios clínicos directamente implicados en su aplicación. Y, periódicamente, deben ser actualizadas y redifundidas.