Accesibilidad a la edificación como indicador urbano en los procesos de regeneración urbana integrada en centros históricos de ciudades patrimoniales

Resumen

Las ciudades provocan un gran impacto en el medio ambiente. Por ello, promover la sostenibilidad y la resiliencia en los asentamientos humanos debe ser una prioridad. Los indicadores urbanos son una herramienta valiosa para diseñar políticas públicas, apoyar decisiones y evaluar el progreso en la dirección adecuada (Suárez, Gómez-Baggethun, Benayas, & Tilbury, 2016). Por otra parte, las propuestas de planeamiento urbano deben vincular a toda la sociedad, promoviendo las condiciones ideales de ciudad y buscando preservar y mejorar las circunstancias sociales y ambientales. La búsqueda de indicadores que den cuenta de procesos de habitabilidad, inclusión social, innovación, calidad ambiental, conectividad, diversidad, equidad social, inversión, servicios públicos, transformaciones urbano-rurales, transporte y cultura entre otros, toma especial relevancia (ONU Hábitat, 2014). La necesidad de hacer accesibles las ciudades es capital (Defensor del pueblo Andaluz, 2010). Uno de los aspectos más claramente potenciados por todas las legislaciones, desde la Declaración de Toledo 2010 hasta la reciente “Agenda Urbana Española” es la necesidad de hacer accesibles todos los ámbitos de la ciudad. Sin embargo, la accesibilidad a la edificación (en sentido estricto), apenas ha tenido consideración como indicador de habitabilidad en la transformación urbana. La literatura científica respecto a los indicadores urbanos se ocupa de las funciones y utilidades que se deben cubrir, qué parámetros hay que tener en cuenta a la hora de diseñar un correcto indicador urbano y qué condiciones deben de cumplir. Partiendo de la clasificación general y el análisis de su problemática común: disponibilidad y viabilidad de los datos, actualización, escala y compatibilidad se analizan dos tipos de indicadores: de sostenibilidad urbana, y de resiliencia urbana, entendida esta última como evolución cuyo objetivo principal es la adaptación al cambio climático. Los conjuntos de indicadores normalizados se dividen en grupos relacionados con: ciudades inteligentes; ciudades sostenibles; y ciudades inteligentes y sostenibles. Analizados todos ellos, en esta tesis se construye un indicador que posibilite acciones de regeneración urbana y facilite la accesibilidad total a la edificación en los cascos históricos de las ciudades patrimoniales. Las áreas de trabajo elegidas para esta tesis, los centros históricos de Granada, Málaga, Sevilla, Toledo y Valencia tienen gran importancia como tradicionales e históricos destinos turísticos caracterizados por la intensidad y velocidad de sus cambios. Todos ellos están sometidos al impacto de fenómenos urbanos como la despoblación, el envejecimiento, la tercerización, la gentrificación y, desde finales del siglo XX a nuestros días, una intensa “turistificación”.