Análisis del perfil psicosocial, motivacional, laboral y competencial del alumnado universitario de las ciudades transfronterizas de Ceuta y Melilla

  1. Sánchez Bolívar, Lionel
Dirigida por:
  1. Asunción Martínez Martínez Codirectora
  2. Félix Zurita Ortega Codirector

Universidad de defensa: Universidad de Granada

Fecha de defensa: 25 de mayo de 2022

Tribunal:
  1. Jorge Expósito López Presidente
  2. Eva María Aguaded Ramírez Secretaria
  3. Antonio José González Jiménez Vocal
  4. Pilar Puertas Molero Vocal
  5. Juan-Jesús Torres-Gordillo Vocal
Departamento:
  1. MÉTODOS DE INVESTIGACIÓN Y DIAGNÓSTICO EN EDUCACIÓN

Tipo: Tesis

Resumen

Como principales resultados y conclusiones, se destaca que la motivación del alumnado universitario es una variable psicosocial determinante que influye sobre el rendimiento académico, sobre el abandono de la titulación y en la probabilidad de inserción sociolaboral. Manifestándose, mayoritariamente, una motivación de naturaleza intrínseca y relacionándose un mayor nivel de esta con un menor nivel de procrastinación que el estudiantado más amotivado o desmotivado. El alumnado universitario con un alto nivel de desarrollo social, es decir, competente socialmente, tiene una mayor insertabilidad laboral que el estudiantado con un menor desarrollo social. Las habilidades sociales implicadas en la resolución de conflictos van a favorecer que el alumnado las emplee como herramienta de afrontamiento ante los desafíos académicos, sociales, laborales y personales que se le presenten en su vida diaria. La inteligencia emocional es una variable psicosocial presente en la toma de decisiones. La regulación emocional va a facilitar el desarrollo emocional y, por tanto, fomentará el afrontamiento, de forma positiva, de los obstáculos que se le presenten al alumnado, ayudando en la toma de decisiones ante los mismos. Asimismo, la inteligencia emocional se relaciona con el bienestar psicológico y social autopercibido por este, siendo fundamental para mantener un estado de salud física, mental y social óptimo. Las mujeres de educación superior cuentan con un mayor nivel de habilidades sociales que los hombres, siendo las más importantes las habilidades de cooperación y apoyo, empatía, atención y escucha e iniciativa, percibiendo el alumnado un mayor desarrollo de las mismas, mientras que manifestaron tener poco desarrolladas habilidades como el control emocional y el liderazgo. El estudiantado de educación superior que estudia y trabaja simultáneamente, o que cuenta con experiencia laboral previa, demuestra mayores niveles de competencia social que el alumnado desempleado, concretamente en habilidades sociales para seguir órdenes, para el razonamiento numérico, de liderazgo, iniciativa y autonomía, así como una mayor capacidad de análisis y de síntesis. La religión y la titulación que el estudiantado universitario cursa son variables determinantes del nivel motivacional del alumnado universitario de ciudades multiculturales y transfronterizas como Ceuta y Melilla. El alumnado cristiano cuenta con un mayor nivel de motivación intrínseca que el musulmán, mientras que el estudiantado experimenta valores de amotivación superiores al alumnado cristiano. En cuanto a la titulación, el estudiantado de titulaciones con un fuerte carácter vocacional, como el grado en Educación Infantil, manifiestan una mayor motivación que el alumnado de titulaciones como el grado en Administración y Dirección de Empresas. El estudiantado del grado en enfermería manifiesta un nivel medio-alto de habilidades sociales como la adaptabilidad, la empatía y la prosocialidad y un medio nivel de motivación intrínseca, más bajo en comparación con el alumnado de otras titulaciones como Educación Física, que cuenta con valores superiores que el alumnado de Enfermería. Finalmente, el estudiantado femenino y católico se encuentra intrínsecamente más motivado que el masculino y que el musulmán o el ateo. El alumno sociable y asertivo está más motivado intrínsecamente que el asocial, mientras que el reservado cuenta con un nivel superior de amotivación que los estudiantes más comunicativos, existiendo una correlación negativa entre la amotivación y la sociabilidad y la asertividad del alumnado por lo que cuanto más sociable y asertivo es el estudiante, menor es su amotivación, y cuanto más agresivo e insociable es, mayor es la amotivación que experimenta.