Evaluación nutricional en menores de 13 años de República Dominicana

  1. VELILLA CAÑABATE, EMILIO
unter der Leitung von:
  1. María Dolores Ruiz López Doktormutter
  2. Reyes Artacho Martín-Lagos Co-Doktormutter

Universität der Verteidigung: Universidad de Granada

Fecha de defensa: 09 von April von 2010

Gericht:
  1. Rosaura Farré Rovira Präsident/in
  2. María Soledad Vieitez Cerdeño Sekretärin
  3. Antonio Pérez de la Cruz Blanco Vocal
  4. Carlos de Teresa Galván Vocal
  5. Rafael Rodríguez-Contreras Pelayo Vocal
Fachbereiche:
  1. NUTRICIÓN Y BROMATOLOGÍA

Art: Dissertation

Teseo: 290511 DIALNET

Zusammenfassung

Se ha llevado a cabo una evaluación nutricional en un total de 255 niños, con edades comprendidas entre 12 y 156 meses, que viven en 2 zonas de la República Dominicana, con un bajo desarrollo social. Tras el análisis de los datos obtenidos se han llegado a las siguientes conclusiones. - La situación económica, familiar y el estado de la vivienda son determinantes en la alimentación de los niños estudiados. Las familias son por lo general numerosas y desestructuradas Los ingresos económicos no son fijos en más del 48% de la población, y aquellos que perciben un sueldo, este suele estar muy por debajo de la línea de la pobreza. Las características de la vivienda son: 1 ó 2 habitaciones por vivienda, donde conviven al menos 5 personas y donde el número de camas no llega a 3. No tienen equipamiento sanitario y el agua corriente (no potable) solo está disponible en el 26% de los hogares. - El historial clínico, realizado con ayuda de la madre, indica que el 96,5 % de los niños nació en un centro médico, que todos habían cumplido el calendario vacunar y que el periodo de lactancia materna es bajo. La exploración física realizada indica que hay una alta prevalencia de afectaciones respiratorias y gastrointestinales. - Los diversos patrones de referencia antropométricos internacionales que pueden ser utilizados para definir el estado nutricional hacen que la interpretación de los resultados obtenidos sea poco concluyente. Al utilizar los indicadores talla/edad, peso/edad y IMC/edad, propuestos por OMS solo el 0,7% de la muestra presenta desnutrición severa para el indicador IMC/edad. - Los hábitos alimentarios de la muestra indican que la ingesta de alimentos se realiza en 4 ó 5 comidas diarias. No existe una planificación semanal de los menús. La compra de alimentos es diaria, y se lleva a cabo antes de cada una de las comidas en colmados o puestos callejeros. La base de la alimentación es el arroz blanco, que se suele acompañar de habichuelas y pollo. El consumo de pescado es muy bajo y normalmente es seco o enlatado. Las verduras y hortalizas se utilizan como base del sofrito y las frutas más consumidas son el guineo y el mango. Un tercio de la muestra come huevos diariamente, normalmente en la cena. La leche utilizada es en polvo reconstituida con agua y el aceite más utilizado es el de soja. - El estudio de la ingesta de energía y nutrientes, determinado por un registro de 24 horas, muestra las mismas características en los 3 grupos de edad estudiados: 1-3 años, de 4 a 8 años y de 9 a 12 años. Una baja ingesta de energía, un perfil calórico que refleja una dieta basada en alimentos hidrocarbonados pero con un bajo contenido en fibra, y sobre todo deficiencias importantes en yodo, vitamina A y hierro. Si bien hay que destacar que a mayor edad, los porcentajes de niños que presentan deficiencias de micronutrientes son mayores, así como el número de nutrientes con ingestas deficitarias. Esto indica el menor control en la alimentación del niño en función de la edad. Los bajos resultados obtenidos en la ingesta de energía y micronutrientes puede deberse, en parte, a las dificultades encontradas en la cuantificación de alimentos y a las diversas tablas de composición de alimentos utilizadas.